TRISTEZAS Y
SUFRIMIENTOS
En la vida existen las nubes y existe el cielo. Muchos maestros orientales dirán
que antes de este estado que ellos llaman "Iluminación" - se
identificaban con las nubes y estaban presos de este sentimiento. Después de la
iluminación ellos se identifican con el cielo...
- ¡Oh, ahí viene una nube, una nube negra! Viene y se va...
Es tan sencillo que parece increíble. Y después de un momento dirás:
- ¡Eh! Pasaron seis meses desde que vino una nube negra. Pero no voy a hacer
depender mi felicidad de si las nubes vienen o no.
Pero lo que te sucede ahora es que estás en tensión por estar deprimido y
cuanto más se combate la depresión, peor se vuelve. Debes enfrentarte con
estas cosas sin combatirlas, porque cuánto más las combates más las
fortaleces.
Cuentan que había un gran Maestro Zen de quien se decía que había alcanzado
la Iluminación; y un día su discípulo le dijo:
- Maestro, qué ha obtenido con la Iluminación?
Y él respondió:
- Bien, te diré esto: antes de estar iluminado solía estar deprimido... Después
de haber sido iluminado seguí estando deprimido...
Es desconcertante! ¿No? La depresión no ha variado; ha variado la actitud del
maestro hacia ella. Por extraño que parezca él no afirma:
- No seré feliz hasta que esta depresión se vaya...
¿Sabes?, tú también podrías estar sereno y calmo y ser feliz mientras
persiste la depresión, sin combatirla, sin ser perturbado por ella, sin tratar
de... ¡nada! Estarás sereno.
Ésa es la diferencia. Entonces podrás atravesar por pesares físicos, e
incluso por sufrimientos emocionales, y no ser perturbado por ellos.
Artículo aportado por
el R:.H:. Walter Cruzalegui